Los genocidios contemporáneos

Genocidio. ¿Ha dicho genocidio?

Buscamos defender la vida humana inocente. Esto concierne obviamente a los genocidios contemporáneos siguientes:

• el genocidio de los abortos instrumentales o químicos (oficialmente más de 10 millones de niños exterminados desde 1974 en Francia), incluyendo los abortos eugenésicos ocultos bajo el siglas ITG (interrupción «terapéutica» de embarazo),

• el genocidio de los abortos provocados por la «contracepción» química (probablemente más de 10 millones de víctimas adicionales en el mismo período),

• el genocidio eugenésico de los ancianos y discapacitados por la eutanasia, que se practica desde hace mucho tiempo en Francia por un cuerpo médico y paramédico corrupto, y que la mafia en el poder en Francia quiere legalizar, para evitar que los asesinos puedan ser perseguidos.

La denominación de «genocidio» es un neologismo reciente (1943). Se refiere obviamente a los genocidios de judíos, eslavos, razas consideradas inferiores, implementados por el régimen eugenésico alemán entre 1933 y 1945.

En el Código Penal francés, bajo la influencia de Badinter en 1994, el genocidio se define así: Artículo 211-1 Modificado por Ley n°2004-800 del 6 de agosto 2004 - art. 28 () JORF 7 agosto 2004

La ONU, en la Convención para la prevención y la represión del crimen de genocidio del 09/12/1948, art.2, y el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional de 1998, art.6, define así el (crimen de) genocidio:

Constituye un genocidio el hecho, en ejecución de un plan concertado tendiente a la destrucción total o parcial de un grupo nacional, étnico, racial o religioso, o de un grupo determinado a partir de cualquier otro criterio arbitrario, de cometer o hacer cometer, en contra de miembros de este grupo, uno de los actos siguientes : atentado voluntario a la vida ; atentado grave a la integridad física o psíquica ; sometimiento a condiciones de existencia de naturaleza a entrañar la destrucción total o parcial del grupo ; medidas destinadas a obstaculizar los nacimientos ; traslado forzado de niños.

cualquiera de los actos siguientes cometidos con la inten­ción de destruir, en todo o en parte, un grupo nacional, étnico, racial o religioso, como tal: Asesinato de miembros del grupo; Atentado grave a la integridad física o mental de miembros del grupo; Sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física total o parcial; Medidas destinadas a impedir los nacimientos en el seno del grupo; Traslado forzado de niños del grupo a otro grupo.

La dificultad en el marco francés es poder demostrar jurídicamente a jueces, hoy llenos de prejuicios izquierdistas, que se trata de un plan concertado, intencional, pero los puntos a, b, c y d están bien presentes.

Para la ONU, es más complicado, porque la ONU promueve el eugenismo, notablemente favoreciendo el genocidio del aborto y de la despoblación (FNUAP, UNICEF, etc.); entonces, su definición restringe las víctimas a un «grupo nacional, étnico, racial o religioso», lo que le permite no ser perseguida por el aborto y la despoblación que promueve en todas partes entre los pobres. Al contrario del difunto Papa Francisco, no apoyamos la idea de un gobierno mundial onusiano. A pesar de ello, hay en la ONU una diversidad de agencias y de personas más o menos corrompidas, que producen a veces informaciones dignas de confianza.

Para nosotros, el genocidio cubre también el intento de exterminio de una población en función de su edad o de su estatus social.

El genocidio de Gaza

La defensa de la vida humana inocente concierne también a los genocidios más clásicos: así los palestinos de Gaza viven desde hace muchos años un genocidio y una limpieza étnica (bloqueo económico, hambruna organizada, desplazamientos forzados, masacres de civiles, mujeres y niños incluidos, destrucción de hospitales e infraestructuras, utilización de armas de destrucción masiva, etc.), perpetrados deliberadamente por el estado israelí, el cual es habitual desde 1947 de tácticas brutales y terroristas. Este genocidio ha retomado una gran amplitud tras el ataque palestino del 7 de octubre de 2023, en el que murieron 1200 israelíes; en realidad, de estos 1200, aproximadamente 400 eran militares israelíes, aproximadamente 800 civiles, de los cuales la mayoría fueron matados por los soldados israelíes¹, en aplicación de la directiva Hannibal.

La reacción del estado de Israel ha sido, como de costumbre, desproporcionada: sobre la zona urbana densamente poblada de Gaza, Israel ha utilizado bombas al fósforo blanco (prohibido) y bombas de una tonelada o más (serie Mark 84, de las cuales 14 000 ejemplares han sido entregados por los EE.UU. a Israel en 2023-2024); no son armas que permitan apuntar a un adversario armado, sino que una sola bomba mata a todos los civiles, mujeres y niños incluidos, en un radio de 300 metros. Del 7 de octubre de 2023 al 6 de noviembre de 2024 (1 año), 85 000 toneladas de bombas han sido lanzadas sobre Gaza, más que el conjunto de la Segunda Guerra Mundial. A octubre de 2025, para vengar 1200 muertos israelíes, las víctimas palestinas de las represalias israelíes pueden estimarse en 67.000 muertos y 170.000 heridos², sin contar los muertos indirectos (desnutrición, enfermos no atendidos, intoxicaciones debidas al agua y al envenenamiento por las bombas). Del lado israelí, se reconoce 200 000 víctimas del lado palestino (muertos o heridos)³. Entre los muertos, al menos el 83% son civiles⁴. Esta desproporción resulta de una táctica terrorista deliberada que utilizan los israelíes desde hace años: para matar un objetivo militar potencial, todo el edificio es destruido con sus habitantes, que se descalifican tratándolos de «escudo humano», en resumen, ¡no tenían más que no estar allí! Incluso se oye a parlamentarios israelíes decir que bebés palestinos son terroristas desde su nacimiento⁵.

A una menor escala, los nazis habían bombardeado Londres (18 300 toneladas de bombas), los Aliados lo hicieron sobre ciudades alemanas como Hamburgo (8 500 toneladas de bombas) Dresde (3 900 toneladas de bombas, incluyendo fósforo), sobre ciudades de Normandía (6 de junio de 1944: 52 000 víctimas), y sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki (aproximadamente 200 000 víctimas). Es criminal e indefendible.

Nos oponemos a estos genocidios porque somos cristianos, discípulos de Jesucristo; la Ley de Dios se opone firmemente a los asesinatos (matar a un civil en tiempo de guerra es un asesinato, llamado hoy «crimen de guerra»). Frente a esto, los israelíes contemporáneos, que apoyan al 82% a su gobierno actual, pretenden que son el pueblo elegido de Dios y que están en su derecho.

Sin embargo, hay, notablemente en los EE.UU., numerosos cristianos evangélicos que apoyan incondicionalmente al estado israelí contemporáneo, cualesquiera que sean los horrores que cometa. Tienen actualmente una fuerte influencia sobre las decisiones políticas estadounidenses de apoyo y financiación al estado de Israel. Esto plantea un enorme problema a las iglesias cristianas en su conjunto, porque esta complicidad de genocidio es una piedra de tropiezo para los pueblos no cristianos, es un insulto a Jesucristo, nuestro Dios. Porque, hoy, a causa de este lobby cristiano sionista y de los neoconservadores (cripto-sionistas), los Estados Unidos financian⁶ estas guerras israelíes, suministran las armas, y son por lo tanto cómplices de los crímenes de guerra de Israel. Se trata de un género de idolatría del estado de Israel.

La herejía sionista

Es por lo tanto importante volver sobre los errores teológicos que están en la fuente de esta catástrofe, y tratar el sionismo como una herejía; el genocidio de Gaza es la consecuencia directa.

• El olvido del juicio de Dios contra Israel (divorcio). En 70 d.C., Jerusalén fue destruida por los romanos, que, en la ocasión masacraron más de 1 millón de judíos durante su asedio (cf. Flavio Josefo). Este juicio de Dios fue ejecutado hacia Israel a la suite de su rechazo de Jesucristo, como Él lo había anunciado en Mateo 21:33-46 [la parábola de los viñadores y su explicación]; en Mateo 24, con un marcador temporal importante en el versículo 34: «De cierto os digo, que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca.»; en el libro del Apocalipsis, que advierte de este juicio de divorcio de Israel, asimilando Jerusalén a una prostituta y a «Babilonia la grande», en conformidad con Deuteronomio 30:17-20.

• El olvido del fin de la Antigua Alianza: La Antigua Alianza está por lo tanto terminada desde el año 70 d. C.: estamos bajo el régimen de la Nueva Alianza. El estado israelí, de origen socialista y ateo, no tiene ningún mandato de parte de Dios para eliminar y expulsar a los pueblos viviendo en Palestina. Tanto más que su filiación con los judíos del primer siglo es más que dudosa. Como mucho su religión (para aquellos que no son ateos) se inspira en la de los fariseos de entonces. En consecuencia, ya no hay pueblo elegido específico.

• El olvido de la Nueva Alianza que toma el relevo de la Antigua Alianza (teología de la supersesión, validada desde hace siglos). San Pablo lo explica muy claramente, notablemente en Gálatas 3:16-29 [que se resume así: «Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús. Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según la promesa.»], Gálatas 6:15-16, Romanos 9:6-8, etc. Esta teología es conforme a la Palabra de Dios y es por lo tanto siempre válida, a pesar de su abandono por algunos premilenaristas convertidos sionistas⁷.

• Interpretaciones anacrónicas de profecías o de mandatos bíblicos ya realizados, que los premilenaristas imaginan en el futuro (a la suite de enseñanzas defectuosas como las de J.N. Darby, Scofield, etc.), y que justificarían su apoyo al estado israelí contemporáneo. Entre estos anacronismos:

  • La promesa de Abraham aplicada al estado israelí contemporáneo. La verdadera promesa a Abraham (Génesis 12:3) es siempre válida, pero concierne ahora a la descendencia de Abraham en la fe, que es Jesús, y por extensión se perpetúa con la Iglesia (Gálatas 6:16 ya citado). Por otra parte, incluso en el tiempo de la Antigua Alianza, esta promesa concernía únicamente a la descendencia en la fe, porque una parte no negligible de la descendencia genética no ha heredado esta promesa (Ismael, Esaú, los judíos caídos en la idolatría, la mayoría de los fariseos, etc.)

  • La eliminación de Amalec. Ella fue decidida por Dios durante el Éxodo (Éx. 17:8-16, Deut. 25:17-19) a la suite de los crímenes de los amalecitas contra el pueblo de Dios. Se ven los efectos con el asunto de Saúl y Agag (1 Samuel 15), luego de Hamán y Ester (Ester 7). Es más que probable que el linaje de Amalec haya sido destruido hace más de 2000 años. Calificar a los palestinos contemporáneos de Amalec, como lo hace Netanyahu (que no es Josué), es un anacronismo, tanto más que uno de los grandes crímenes de Amalec⁸ era atacar a los civiles, como lo hace Israel hoy a gran escala, mucho más de lo que lo han hecho los palestinos.

  • El regreso a Jerusalén, prometido por Dios a través de Jeremías (cap.50:19-20) , Ezequiel (cap.40 a 48), Daniel (cap. 9) y otros profetas, ya ha tenido lugar en la época de Ciro⁹, antes de la llegada de Jesús. Por lo tanto, ya no está de actualidad. Pretender que se trata de eventos de la época moderna indica incompetencia teológica e histórica, o bien deshonestidad (o las dos).

  • La conquista de la tierra prometida por Israel, a la suite de la liberación de la esclavitud de Egipto, ya ha tenido lugar (Josué 21:43-45). Esta conquista era al mismo tiempo un juicio de Dios sobre los pueblos de Canaán¹⁰, y el pueblo de Israel actuó entonces como ejecutor de este mandato preciso genocidándolos. Ahora es del pasado revocado. Desde la crucifixión, la resurrección y la ascensión de Jesucristo, luego la destrucción de Jerusalén, la Antigua Alianza se ha vuelto caduca, y ningún pretendido descendiente de Abraham puede prevalerse de un derecho de pueblo elegido sobre la tierra del Israel antiguo.

  • La reconstrucción del templo. El primer templo fue construido por el rey Salomón, y fue destruido en 586 a.C. por los babilonios. El segundo templo fue reconstruido por Zorobabel, al regreso del exilio en 516 a.C., luego restaurado y ampliado por Herodes I en 19 a.C., luego destruido definitivamente por los romanos en 70 d.C. Algunos cristianos sionistas¹¹ apoyan en la práctica a los sionistas revisionistas (a la Jabotinsky / Netanyahu), que quieren reconstruir una tercera vez este templo¹², para hacer de nuevo sacrificios animales. Sería un afrenta adicional a Jesús, nuestro Rey, cuyo sacrificio es totalmente suficiente. Para un cristiano, apoyar esta afrenta, es renegar de Jesús.

  • El premilenarismo (a menudo dispensacionalista) tuerce los textos de la Biblia para fabricar una visión de un futuro en el cual el pueblo de Israel tendría todavía un rol particular; esta teología ha llevado a un gran número de evangélicos a promover el sionismo, sin haberlo siquiera reflexionado seriamente.

• El rechazo de la Ley de Dios (herejía antinomista): Paradójicamente, los cristianos sionistas que han olvidado el fin de la Antigua Alianza, son a menudo antinomistas, rechazando la Ley de Dios en bloque, sin tener en cuenta el hecho de que el Nuevo Testamento la valida, excepto los elementos típicos como los sacrificios, etc.

  • Notablemente, Jesús ha confirmado que los 2 mandamientos generales constituyendo la Ley de Dios son siempre válidos (Mateo 22:38-40), con un detalle en Mateo 19:18-19: «Jesús respondió: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo.»

    Los cristianos sionistas violan actualmente estas Leyes de Dios apoyando un estado israelí impío que, pretendiendo ser el heredero del pueblo elegido de la Antigua Alianza, comete grandes iniquidades (asesinatos de civiles inocentes, robos y destrucciones de propiedades ajenas y de árboles frutales, perversidad del discurso, racismo anti-árabes, etc.), del mismo orden que las que los judíos han sufrido con la Shoah. Aprueban así el masacre de civiles por las armas y por el bloqueo, y la táctica israelí deliberada de destruir los hospitales, las escuelas y los civiles, la limpieza étnica, sin ningún respeto de las leyes de la guerra (convenciones de Ginebra que habían sido votadas a la suite del genocidio de los judíos).

  • En un asunto jurídico, una acusación necesita 2 o 3 testigos (Deut. 19:15¹³, Heb. 10:28, etc.) para ser válida. Aquí los cristianos sionistas desprecian a un pueblo oprimido y aprueban su opresión, a pesar de la evidencia de la opresión confirmada por los testigos cristianos locales, que deberían considerar como sus hermanos. Sin embargo, tales crímenes deberían ser tenidos en cuenta para restaurar la justicia – y en un primer tiempo para hacer cesar el financiamiento de las armas por los EE.UU.; y hay aquí mucho más que 2 o 3 testigos, para acusar al estado israelí contemporáneo:

• cf. el llamado al arrepentimiento lanzado en 2023: «Una llamada al arrepentimiento: carta abierta de cristianos palestinos a líderes y teólogos cristianos del occidente», octubre 2023.
• cf. las publicaciones de los cristianos palestinos, incluyendo «Ser cristiano después de la desolación de Gaza» (12/08/2025)¹⁴.
• cf. el libro de Jacques Baud, Operación Tormenta de Al Aqsa: La derrota del vencedor, 2024¹⁵.

Cuando se reprochan estos elementos a los cristianos sionistas, se obtiene a menudo el silencio radio, o una fin de no recibir, con o sin los problemas siguientes:

• La arrogancia interpretativa: Las cuestiones de escatología eran generalmente consideradas como secundarias, pero no es en realidad el caso para los cristianos «sionistas»; en lugar de explicar con sabiduría que las interpretaciones bíblicas en el dominio de la escatología son delicadas y a veces inciertas, afirman con arrogancia que su interpretación es la única buena, a pesar de su absurdidad. Resultado: lo que parecía secundario engendra hoy guerras y un genocidio…

• La reprise del narrativo israelí mentiroso: Los cristianos que persisten en el sionismo deciden entonces no buscar la verdad y creer y propagar los mentiras oficiales (positivos o por omisión) de los gobiernos israelíes, y de apoyar incondicionalmente sus actos. Un ejemplo típico de esta servilidad puede leerse en el sitio de la ICEJ¹⁶. Por lo tanto han decidido:

  • Considerar el ataque palestino del 7 de octubre de 2023 como «el» comienzo del conflicto, repitiendo los mentiras israelíes sobre las violaciones, por ejemplo, y censurando el hecho de que número de muertos civiles israelíes son debidos al ejército israelí (según la directiva Hannibal); y sobre todo «olvidando» que el 7 de octubre no es más que un evento en una larga sucesión de iniquidades que han comenzado en 1947, con la intrusión de colonos este-europeos en Palestina, sin ningún respeto por las poblaciones locales, que han desposeído, expulsado, masacrado. Es por lo tanto lógico que estas poblaciones maltratadas no acepten su situación y resistan, al igual que la Francia de los años 1940 vio la emergencia de resistencias armadas contra el ocupante nazi; y como en la mayoría de los movimientos de resistencia armada, el terrorismo es una tentación.

  • Repetir sin espíritu crítico la propaganda israelí, notablemente en su re-escritura de la historia que omite recordar las agresiones israelíes (la Nakba¹⁷ de 1947, etc.), la voluntad israelí deliberada de limpieza étnica y el aspecto desproporcionado de sus represalias que no tiene ningún miramiento por los civiles.

  • Ignorar, minimizar o negar la realidad del genocidio de Gaza y de la hambruna que allí es organizada por el estado israelí actual desde hace años. Todo ello apoyando al gobierno israelí que ha sido sin embargo muy claro sobre sus intenciones genocidas¹⁸. Los cristianos sionistas continúan sin embargo negando el elemento intencional, hablan de «el ejército más moral del mundo», de su bondad al advertir a los civiles que deben huir antes del bombardeo, sin otra prueba que el discurso de Netanyahu y los suyos. Nos piden tener una «claridad moral», la de aceptar la violación de la ley moral de Dios. También nos reprochan ignorar los otros genocidios en curso (Congo, etc.), sin ver que en tanto que cristianos, estamos colectivamente implicados en Gaza, a causa de los cristianos «sionistas» que están del lado del mango.

  • Acusar a las víctimas principales del conflicto, los árabes, notablemente los palestinos. Siguen en ello el narrativo de Netanyahu: nunca responder de los crímenes de Israel, sino sistemáticamente acusar al «Hamas» de terrorismo, aunque sea mintiendo efrontadamente, «olvidando» oportunamente que el Hamas ha sido financiado por el estado israelí, para impedir al Fatah crear un estado palestino¹⁹.

  • Algunos van hasta animar al estado de Israel a continuar en sus crímenes y sus guerras, contra los palestinos, los iraníes, los libaneses, los sirios, los iraquíes, y de una manera general todos sus vecinos. Instrumentalizan para ello textos bíblicos, notablemente del Antiguo Testamento, fuera de su contexto (por ejemplo asimilan a los gazatíes y a Irán a Amalec, lo que es aberrante, tanto más que es una inversión acusatoria, porque lo que caracterizaba a Amalec se aplica al estado israelí contemporáneo: su carácter arrogante, cruel y guerrero, irrespetuoso de los civiles inocentes). Notemos que entre estos belicistas en cátedra, hay falsos profetas probados, tales como (entre los más recientes) Hal Lindsey²⁰, Edgar Whisenant²¹, Grant Jeffrey²², John Hagee²³, etc.²⁴ que han profetizado varias veces en el pasado cosas que no han sucedido; es así como se identifican los «falsos profetas» y la Ley de Dios es muy severa con ellos²⁵ (cf. Deut. 18:22); pero los «cristianos» sionistas parecen creerse por encima de la Ley de Dios, y falsos profetas como John Hagee continúan animando a Trump a guerrear por Israel. Jesús nos ha advertido contra estos falsos profetas, que son lobos disfrazados de ovejas, y cuyo fruto es malo; es por otra parte a esto que se les reconoce (cf. Mat. 7:15-20).

  • Solo ven el creciente antisemitismo en todo el mundo, sin percibir que es una consecuencia previsible del comportamiento inhumano del actual Estado israelí.

  • Intentan hacer confundir el anti-sionismo y el antisemitismo. Así todo opositor a la política del estado israelí contemporáneo se encuentra acusado de antisemitismo. A este régimen, los apóstoles Pablo y Juan, los padres de la Iglesia, los santos de los siglos pasados, la mayoría de los cristianos de todo el mundo, y una buena parte de los judíos, serían sucios antisemitas. Esto no tiene sentido. Una gran parte de los políticos de la derecha francesa entretiene esta confusión. ¿Están comprometidos por el dinero, o es simple vasallaje estadounidense?

  • Fingen ignorar las últimas tomas de posición del difunto Charlie Kirk, continuando considerándolo como un cristiano sionista, mientras que rompía con los sionistas a causa de las presiones que le hacían sufrir, notablemente para impedir su libertad de expresión a propósito de los asuntos de Irán y de Gaza (lo que ha probablemente provocado su asesinato)²⁶. Así había rechazado desde el verano de 2025 la invitación y el dinero de Netanyahu que le proponía 150 millones de dólares para su organización (Turning Point USA).

  • Desprecian a nuestros hermanos del Medio Oriente e ignoran sus peticiones²⁷ y sus publicaciones, de las cuales una de las más visibles es «Ser cristiano después de la desolación de Gaza» (12/08/2025); ¡prefieren organizar reuniones de oración por Israel únicamente, ignorando la masacre de los civiles palestinos (por «claridad moral»)!

La condena del premilenarismo

Todo esto muestra que las cuestiones de escatología son en realidad muy importantes. Ya lo habíamos visto con la escatología marxista, que debía su éxito a su promesa de un futuro radiante, lo que le aseguró una gran influencia entre los pueblos descristianizados durante casi un siglo.

Es la verdad que nos hace libres. Hay que ahora romper con esta teología premilenarista errónea; a la hora de las comunicaciones instantáneas, el mundo entero ve las consecuencias nefastas, se puede realmente calificarla de herejía. San Pablo ya había hablado de ello a propósito de los judaizantes (Gal.2:4-21, 6:12-15) . La mayoría de los fieles o parroquianos no entiende gran cosa a estas cuestiones y se limita a repetir lo que los pastores les predican. Desde más de un siglo, estos últimos han sido des-formados durante su formación, y es un gran esfuerzo el de replantear lo que se ha aprendido.

Participan en este sionismo «cristiano» numerosas organizaciones, más o menos financiadas por Israel²⁸. La organización Focus on The Family, fundada por el Dr Dobson, y ahora implicada con la administración Trump, continúa apoyando incondicionalmente a Israel²⁹. Lo mismo ocurre con el falso profeta John Hagee y su organización CUFI (Christians United for Israel), y de muchas otras, que constituyen de hecho la mayor parte de los lobbys pro-Israel en los Estados Unidos (hay más sionistas cristianos que sionistas judíos), y han apoyado guerras injustas contrarias al interés de los EE.UU. y que han matado cientos de miles de civiles³⁰. Estas guerras han obviamente generado a su vez terrorismo y suscitan ahora una oposición creciente de los cristianos al sionismo.

El cambio está en marcha

Afortunadamente, desde los años 1990, el dispensacionalismo está en pérdida de velocidad en las escuelas bíblicas (que forman a los pastores), sus enseñantes están desapareciendo, después de que su teología ha sido enteramente refutada, sin respuesta inteligente de su parte³¹  y después del ridículo causado por las predicciones pseudo-bíblicas que no se han realizado; pero queda una versión de bajo nivel de esta herejía (que inspiró la tele-novela Dejados Atrás! (Left Behind)³²) que se ha difundido de 1995 a 2016 y que comienza solo ahora a perder influencia.

El sionismo pierde por lo tanto su influencia entre las jóvenes generaciones en los EE.UU.³³ : ven todos los días en Internet y las redes sociales la realidad del genocidio de Gaza, y comienzan a pensar que un cristiano no puede, sin renegarse, apoyar las iniquidades orquestadas por el estado israelí actual y financiadas por el contribuyente estadounidense. Un sondeo ha sido publicado al respecto el 8 de abril de 2025:

Visiones de Israel: Una ligera mayoría de estadounidenses (53%) expresan ahora una opinión bastante o muy desfavorable hacia Israel. Esto representa una aumento de 11 puntos de opiniones desfavorables desde marzo 2022, fecha en la que planteamos esta pregunta por última vez. La proporción de adultos estadounidenses que expresan opiniones muy desfavorables hacia Israel ha prácticamente duplicado durante este período, pasando del 10% en 2022 al 19% en 2025.

Este movimiento de rechazo del sionismo y de sus consecuencias por los EE.UU. está ralentizado por el hecho de que muchos dudan en abandonar el sionismo, porque ciertas partes de la izquierda y de la extrema izquierda se han comprometido para la defensa de los palestinos. Deberíamos al contrario alegrarnos de que las facciones izquierdistas estén por una vez opuestas a un genocidio.

Un cierto número de líderes e influencers cristianos ha comenzado esta démarche, sin siempre replantear su premilenarismo (pero hace falta tiempo para desaprender lo que se ha aprendido en la escuela): Chuck Baldwin, Charlie Kirk, Candace Owens, Tucker Carlson, Max Blumenthal, El Dark Web Evangélico, Eschatology Matters, The Spirit of Prophecy, Law of Liberty, etc.

Los líderes sionistas cristianos envejecientes se preocupan, los calumnian tratándolos de antisemitas, y se obstinan en su voluntad de guerra contra los palestinos, Irán, el Líbano, Siria, etc. Su obstinación arriesga costarles muy caro cuando la arrogancia y la estrategia defectuosa de Israel encuentren el muro de la realidad: Dios interviene en la Historia y Él ya ha comenzado a cambiar los equilibrios del mundo:

• El Occidente (América del Norte + Europa occidental) sufre las consecuencias de su descristianización: despoblación, miseria, totalitarismo, pérdida de influencia, tecnologías militares envejecidas, deudas.

• La Eurasia, vacunada contra el marxismo, vuelve suavemente al cristianismo y recibe las bendiciones: desarrollo, tecnologías militares avanzadas, riqueza creciente, influencia, capital.

• El «Sur Global» sigue a la Eurasia.

Si Israel tuviera la idea loca de atacar de nuevo a Irán, podría sufrir 1 000 mil millones de dólares estadounidenses adicionales de daños en algunos días (el doble de la guerra de los 12 días), y podría por la misma ocasión encontrarse en situación de debilidad y desaparecer.

¿Cómo actuar?

1. Orar:

• Para que los Estados Unidos cesen de alimentar guerras inicuas y genocidios,

• Para que los cristianos abandonen la herejía sionista,

• Para que la paz se instale durablemente en el Medio Oriente,

• Para que los pueblos occidentales vuelvan a Dios, encuentren una cultura de vida y renuncien a sus genocidios (abortos, etc.)

2. Estudiar a aquellos que han destruido la teología dispensacionalista y propagar su visión del mundo cristiana, optimista y constructiva (cf. documentos de referencia a continuación).

Thierry LEFEVRE

Documentos de referencia:

Vídeo La falsa doctrina del sionismo cristiano está empezando a desmoronarse – 27/07/25, Past. Baldwin

Vídeo Gaza es un Holocausto - 3 sept. 2025, Past. Baldwin

Vídeo Las fronteras de la impostura - Israel, un Estado sin legitimidad reconocida, Jacques Baud, 07/11/2025. En este extracto, Jacques Baud vuelve sobre la creación de Israel y desmonta los relatos oficiales que rodean la legalidad de su territorio. Recuerda que las Naciones Unidas nunca han concedido un solo metro cuadrado a Israel, y que la mayoría de las resoluciones votadas contra este Estado nunca han sido aplicadas. A través de un análisis histórico y geopolítico preciso, expone cómo la fuerza ha reemplazado al derecho, y cómo un Estado sin fronteras definidas ha podido imponerse gracias al silencio occidental. Este extracto aborda también :
• Las resoluciones de la ONU violadas por Israel desde 1948.
• La ausencia de legitimidad territorial del Estado de Israel.
• El rol de los sionistas revisionistas en la conquista armada de Palestina.
• La impunidad de Israel y la complacencia del Consejo de Seguridad.

Vídeo La Bestia del Apocalipsis Identificada, Kenneth Gentry, 6 nov. 2025.

Libro Death of the Church Victorious (Muerte de la Iglesia Victoriosa), Ovid E. Need Jr. 2002, 2004. Este libro rastrea, con la ayuda de una documentación abundante, los orígenes y la evolución moderna del «sionismo protestante» y de la teología dispensacionalista, es decir la idea de que Dios actúa de diferentes maneras en diferentes épocas, desde sus orígenes a finales del siglo XVIII hasta finales del siglo XX. Las ideas nuevas y únicas presentadas en esa época eran consideradas no ortodoxas, incluso heréticas. Pero por su devoción y su trabajo persistente, hombres como John Darby, George Muller, Hudson Taylor y Dwight Moody han hecho pasar el cristianismo de la victoria a la derrota y han exaltado el «sionismo» en detrimento de la «Iglesia del evangelio». Hoy, es la teología no dispensacionalista que es considerada no ortodoxa. Las conferencias de Moody en Northfield, la guerra civil y la publicación de la famosa Biblia de referencia de Scofield han permitido al «sionismo» y al dispensacionalismo convertirse en doctrinas bíblicas legítimas en América.

Libro The Incredible Scofield and His Book (El Increíble Scofield y Su Libro), Joseph M. Canfield, 1986. Casi todo el mundo conoce la Biblia de referencia Scofield. Pero nadie antes de esto había redactado un relato detallado de la vida de Cyrus I. Scofield. Y sin embargo, existe una cantidad increíble de informaciones a conocer sobre este hombre, a tal punto que toda persona interesada de cerca o de lejos en el sistema dispensacionalista debería leer este libro.

Es un libro poderoso. Las informaciones están bien documentadas. Quienquiera que se procure este libro y lo lea encontrará cosas asombrosas sobre un hombre cuyo libro es bien conocido, pero cuya vida, según nosotros, ha sido deliberadamente disimulada en sus aspectos más importantes para que no contradiga sus enseñanzas.

Es uno de los libros más poderosos jamás escritos contra el sistema dispensacionalista. Es poderoso porque muestra cómo el libro que ha contribuido más a la promoción de este sistema, la Biblia de referencia Scofield, ha visto la luz.

He aquí un libro que los dispensacionalistas, así como otros, tendrían todo interés en leer. Es poderoso, tan poderoso, osamos decir, que si los dispensacionalistas lo leyeran atentamente, quizás la mitad de ellos se apartarían de este sistema.

Libros The Divorce of Israel (El Divorcio de Israel), Kenneth L. Gentry Jr Th.D. El Divorcio de Israel presenta una aproximación «histórico-redentora» del Apocalipsis. Juan presenta allí un drama judicial en el cual Dios divorcia de su esposa de la antigua alianza, Israel, para poder tomar una nueva esposa, «el Israel de Dios» de la nueva alianza, compuesta tanto de judíos como de gentiles.

Así, el Apocalipsis presenta la transición histórico-redentora de una importancia vital, pasando de una economía de la antigua alianza fundada en la tierra, centrada en la etnia y dominada por el templo, al cumplimiento mundial, panétnico y espiritual de la nueva alianza. Y lo hace destacando el juicio de Dios sobre el Israel geopolítico del primer siglo.

Livre Armageddon Now! The Premillenarian Response to Russia and Israel Since 1917 (Armagedón Ahora! La Respuesta Premilenarista a Rusia e Israel Desde 1917), Dwight Wilson, 1991. Desde hace años, los autores premilenaristas dispensacionalistas predicen que Armagedón es inminente, pero desde hace años, sus falsas profecías no se realizan. En esta actualización de su obra publicada en 1977, Armagedón Ahora!, Dwight Wilson examina estas predicciones concernientes al Armagedón, en particular aquellas que se aplican a Rusia desde la revolución rusa hasta hoy. Con el desmantelamiento de el imperio soviético, este libro está más que nunca de actualidad.

Libro La Caida de Jerusalen:: Fechando el Libro de Apocalipsis, Kenneth L. Gentry Jr Th.D., 1989.

El interés por el Apocalipsis reposa desgraciadamente en gran parte sobre una incomprensión radical de la naturaleza y del objetivo mismos de este libro. Y esta incomprensión se debe en gran parte a una confusión concerniente a la fecha en la que fue escrito.

En esta obra, que retoma la integridad de la tesis de doctorado de Gentry en el Whitefield Theological Seminary, el autor aborda la cuestión importante de la fecha de composición del Apocalipsis. Esta obra se caracteriza por una exégesis minuciosa de los pasajes críticos, un estudio profundo de la literatura erudita sobre el Apocalipsis y una investigación meticulosa en los escritos de los Padres de la Iglesia primitiva y de los historiadores judíos y romanos.

Las pruebas pueden ser sacadas del testimonio del Apocalipsis ella misma y de la tradición de la Iglesia según la cual Juan ha escrito el Apocalipsis antes de la destrucción de Jerusalén, que tuvo lugar en agosto 70 d.C., más bien que en 95-96 d.C., como lo creen numerosos eruditos. Gentry sostiene de manera convencida que la fecha se sitúa hacia 65 o 66 d.C., después del comienzo de la persecución de Nerón y antes de la muerte del emperador Nerón.

La demostración de la fecha del Apocalipsis en esta obra aporta al lector no solo una respuesta a esta cuestión técnica, sino también numerosas explicaciones sobre el texto mismo del Apocalipsis. Esto permite al lector comprender mejor el significado del Apocalipsis.

Libro Días de Venganza - Una Exposición del Libro del Apocalipsis, David Chilton, 1990. Se trata muy probablemente del análisis versículo por versículo el más completo jamás escrito sobre el libro del Apocalipsis. David Chilton se ha atacado a lo que Calvino y Lutero no han siquiera intentado. En la línea de su obra Paradise Restored, Chilton ve a la Iglesia triunfar hasta el fin, con la derrota de Satanás durante el regreso de Cristo. El apóstol Juan presenta una visión de cristianos victoriosos que superan toda oposición gracias a la obra de Jesucristo. Chilton afirma que durante demasiado tiempo, la Iglesia ha trabajado bajo la ilusión de que el fracaso era su único rol en el mundo. Un comentario atractivo, pero no intimidante, tanto para el profano como para el especialista.

Libro Rapture Fever - Why Dispensationalism is Paralyzed (Fiebre del Rapto - Por Qué el Dispensacionalismo está Paralizado), Gary North, 1993. El dispensacionalismo enseñado por C.I. Scofield y Lewis Sperry Chafer no es más defendido por los jóvenes teólogos dispensacionalistas. Solo un puñado de teólogos, en su mayoría de más de 80 años, continúan proclamando la antigua fe, con su separación radical entre el Reino de Dios (era de la Iglesia) y el reino de los cielos (dispensación judía) y la doctrina según la cual la levadura en la Biblia significa siempre el mal. Esta obra muestra por qué el antiguo dispensacionalismo, con su partidismo contra la acción social cristiana, no podía satisfacer ni al test teológico de la verdad ni al test cultural de la relevancia. El antiguo dispensacionalismo todavía se predica en numerosas cátedras, pero ningún seminario enseña más la vieja fe en su forma pura. Esta obra explica por qué.

Libro Locura de los Últimos Días - Obsesión de la Iglesia Moderna, Gary DeMar, 2019. Lo que usted cree sobre el futuro podría hacerle daño. En este libro veraz, Gary DeMar despeja la bruma sobre temas del fin de los tiempos y los explica en un lenguaje claro:
• El significado de «cerca», «dentro de poco», «rápidamente» y «esta generación»
• El discurso profético de Mateo 24
• La reconstrucción del templo
• La abominación de la desolación
• El hombre de la iniquidad
• El significado de 666
• El regreso de Jesús
• La higuera maldita
• El paso del cielo a la tierra
• El anticristo y Armagedón
• El Rapto
• La identidad de «misterio Babilonia»
• Y mucho más...

Este libro probará y desafiará sus puntos de vista, renovará su celo por la verdad viva y lo animará a escapar a la parálisis de... los últimos días de locura.

Libro God’s Plan for Victory (Plan de Dios para la Victoria), R.J. Rushdoony, 1977. Toda una generación de cristianos apegados a la victoria, estimulados por la visión victoriosa posmilenarista de Chalcedon, ha emergido para hacer valer lo que los Padres puritanos llamaban «los derechos reales de Cristo-Rey» en todos los dominios de la vida moderna. En el corazón de esta generación optimista se encuentra la joya de Rousas John Rushdoony, God's Plan for Victory (publicado originalmente en 1977). El fundador del movimiento de reconstrucción cristiana expuso en términos poderosos y convincentes la visión puritana más antigua del avance irreprimible del reino del Cristo por sus santos fieles, utilizando toda la ley de Dios como programa para la victoria terrestre.

Libro ISRAËL ET LA GUERRE MONDIALE DES RELIGIONS : géopolitique et millénarisme (ISRAEL Y LA GUERRA MUNDIAL DE LAS RELIGIONES : geopolítica y milenarismo), Youssef Hindi y Pierre-Antoine Plaquevent, 2024. No se puede comprender la guerra mundial fragmentada en curso, sin aprehender su naturaleza mesiánica profunda.

Por un proceso histórico que este libro expone en detalle, el proyecto sionista de los orígenes se ha transformado en un proyecto «escatopolítico» de naturaleza milenarista, teocrático y supremacista. Es este proyecto que guía ahora al Estado israelí en sus decisiones estratégicas con consecuencias humanitarias dramáticas.

Desde el punto de vista del sionismo mesiánico, el regreso del pueblo judío a Tierra Santa ya no basta. La realización del Gran Israel, pasa por guerras de grandes escalas, en particular la de Gog y Magog, pero también por la construcción del tercer Templo de Jerusalén y la reanudación de los sacrificios sangrientos en su seno. Pero para llegar a realizar este proyecto, cuyos preparativos ya están muy avanzados, los sionistas mesiánicos deben tomar el control integral de la explanada de las Mezquitas. La operación lanzada por el Hamas en octubre 2023 se llama «Diluvio de al-Aqsa», precisamente en referencia a la defensa de la mezquita al Aqsa que se encuentra en la explanada de las mezquitas.

Este libro analiza la trama geopolítica que subyace a los eventos en curso en Tierra Santa. Expone la genealogía y los objetivos reales de la ideología sionista milenarista y del mesianismo activo. Entre estos, figura la destrucción de la cristiandad y del islam. Destrucción que debe preceder el advenimiento de los tiempos mesiánicos y de un monarca universal supuesto reinar sobre el mundo desde Israel.

Somos así los contemporáneos de un momento geopolítico decisivo y apocalíptico. En el sentido propio, un tiempo de destrucción y de revelaciones.

Notas