La utilización de la contracepción química está muy extendida en Francia (71% de las mujeres de 20 a 44 años utilizan algún método "anticonceptivo", el 40% utiliza la píldora(1), el 16%, un dispositivo intrauterino), y no parece haber movimientos de magnitud que se opongan. La única oposición que se deja oír proviene de un ínfimo sector de la Iglesia Católica(2) basada principalmente en razones teológicas: el "creced y multiplicaos" del Génesis, y la historia de Onan: el rechazo a la procreación, bajo todas sus formas ( no sólo el aborto), se considera un pecado(3). Recientemente, algunas farmacias de la región de Burdeos -- rescatadores por otra parte-- fueron procesadas por haberse negado a vender "anticonceptivos" hormonales y se desestimó el recurso presentado por ellas ante la cámara de casación; el diario Le Figaro afirma que habrían actuado por convicción religiosa y omite mencionar las razones primeras que motivaron tal negativa: los efectos abortivos de los supuestos anticonceptivos.

El argumento religioso es el pretexto utilizado por los lobbies eugenistas y sus aliados para silenciar cualquier debate sobre el tema. Ahora bien, sabemos perfectamente que estos adversarios son fundamentalmente deshonestos.

Efectivamente, el argumento principal contra la contracepción química es que equivale a manipulaciones abortivas, lo cual ubica el debate en un nivel más grave, no se trata de oponerse únicamente al rechazo de la fecundidad sino más bien a los crímenes. «Han olvidado» mencionar los «elementos materiales»

El segundo argumento está relacionado con la salud de las mujeres, puesta en riesgo por las altas dosis de hormonas sintéticas.

Lo que todo el mundo cree saber

La gran mayoría cree que la contracepción química inhibe la ovulación e impide así la fecundación: desde ese punto de vista, al no existir concepción de un nuevo ser, no hay aborto; más aún, se puede llegar a pensar que gracias a la píldora se logre disminuir la cantidad de abortos. Para quienes piensan así, los efectos secundarios y la mortalidad inducida por la «píldora» son insignificantes, cosa que los medios de comunicación no dejan de repetir. La contracepción química, entonces, es vista como un mal menor, adaptado al mundo moderno.

En realidad, se trata de creencias simplistas difundidas por la fuerza de la repetición; no son más que eslóganes que se vienen reiterando desde la escuela.

La realidad:

a) los efectos abortivos

La verdad es que la contracepción química siempre ha tenido un efecto abortivo, y que esto casi siempre ha sido ocultado. Veamos los detalles técnicos que nos permitirán comprender el tema: actualmente, existen distintas categorías de contraceptivos químicos:

las píldoras combinadas o estroprogestativas: Están compuestas de dos hormonas de síntesis: estrógenos y progestágenos. En comparación con las primeras píldoras de la década del 60, las dosis hormonales han disminuido notablemente: de 150 µg a 20-35 µg de estrógenos, con el objeto de reducir los efectos secundarios que forzosamente provocan tales dosis de hormonas sintéticas. Por lo tanto, la tasa de ovulación que era del orden del 1 al 10% y consecuentemente el efecto abortivo se han incrementado.

las «minipíldoras o píldoras de progestágeno solamente (que representan aproximadamente el 10% del consumo de píldoras). Éstas contienen generalmente una categoría única de hormonas, progestágenos, en dosis más bajas, que pueden ser variables según el progreso del ciclo. Deben tomarse a horas fijas, casi siempre durante todo el ciclo. En el 30 a 60% de los casos, no impiden la ovulación.

los implantes (Norplant) o las inyecciones (Depo-Provera) que liberan permanentemente progestágenos en el organismo durante muchos meses, con importantes efectos secundarios (cegueras, pérdidas de sangre, obesidad, acné, decoloración de la piel, coágulos de sangre, cicatrices) )(4).

las píldoras llamadas «del día después», a las que hoy se disfraza de «anticonceptivos de emergencia». En realidad son un kit de aborto consistente en dosis masivas de hormonas, cuyo propósito es impedir la implantación del niño en el útero. Los niveles de «eficacia» son del orden del 75%. Según la AMM (autorización de venta, autorisation de mise sur le marché), «el mecanismo de acción no ha sido enteramente elucidado» Este medicamento podría retardar o inhibir la ovulación. Además, dicho medicamento podría inducir modificaciones del endometrio, volviéndolo inadecuado a la anidación. Una vez implantado el huevo, ni siquiera dosis muy elevadas de hormonas pueden impedir que prosiga el embarazo»
Los efectos secundarios pueden ser catastróficos para la mujer. Se acaba de autorizar la venta(5) de un kit llamado Tétragynon en Europa y Preven en los Estados Unidos, fabricado por el alemán - por ahora -Schering.

En 1997 comenzó en los Estados Unidos una gran campaña publicitaria para popularizar este método(6), menos costoso que las píldoras diarias cuando se trata del Tercer Mundo. Baulieu tomó en Francia la posta de esa propaganda(7), y el gobierno socialista francés está a punto de hacer su propia contribución, mediante el lanzamiento de una gran campaña sobre el mismo tema. También la OMS está publicitando este tipo de abortivos, con la recomendación de usar progestágenos solos más que estroprogestágenos(8).

La RU486 se inscribe asimismo en la categoría de las «píldoras del día después»: así la describen sus promotores en el extranjero.

los dispositivos intrauterinos de cobre, con o sin aditivo hormonal, se colocan en el útero, provocando una irritación de la mucosa uterina (el endometrio) que la hace inhóspita para un niño concebido. Los dispositivos intrauterinos no impiden la ovulación y por lo tanto son esencialmente abortivos (blastocidas, dicen ellos). No obstante, están oficialmente ubicados en la categoría de «objetos contraceptivos» y sus fabricantes procuran mantener la confusión sobre su modo de acción, hablando de acción sobre la movilidad de los espermatozoides, sobre la ovulación, sobre la mucosa cervical, lo cual es deshonesto.

la «vacuna anti-embarazo», o anti-hcg [gonadotrofina coriónica anti-humana], que se encuentra todavía en etapa de experimentación en el Tercer Mundo, busca inmunizar el cuerpo de la madre contra la hormona hcg necesaria para la anidación del niño concebido. Se trata de lograr que el útero se vuelva enteramente inhóspito, es un método puramente abortivo.

Ninguno de los modos de acción de estos productos es 100% confiable(9). Varía en función de las personas, de su alimentación y de las enfermedades y tratamientos a las que ellas están sometidas(10). Por consiguiente, una mujer que utilice alguno de los métodos descritos aquí, aunque éste no sea 100% abortivo, nunca sabrá si está o no abortando.

OV : efecto anovulatorio, la ovulación es inhibida pero no en el 100% de los casos; además este efecto disminuye con el tiempo y varía de acuerdo a otros factores.

MUC: la mucosidad cervical es espesa, lo cual retrasa o impide el paso de los espermatozoides; la eficacia de esta barrera contraceptiva es escasa, ya que una experimentación con conejas demostró que el 72% de los espermatozoides logra pasar, a pesar del efecto producido por la ingesta de progestativos sintéticos(11).

END : normalmente, la vascularidad del endometrio crece, para ponerlo en condiciones de alojar al niño aportándole oxígeno y glucosa. Los «anticonceptivos» hormonales impiden un desarrollo normal del endometrio durante el ciclo, volviéndolo así inhóspito para un niño eventualmente concebido. El efecto es abortivo.

TR : ciertas hormonas utilizadas en estos «contraceptivos» perturban el tránsito del niño concebido hacia el endometrio, interfiriendo en las flexiones y los movimientos de las cilias del interior de las trompas de Falopio: algunos productos aceleran y otros retardan el avance del niño quien de esa manera, puede llegar demasiado pronto o demasiado tarde al útero y encontrar un endometrio que no esté preparado aún o que ya se encuentre desmejorado. El efecto es abortivo.

b) los efectos secundarios

Los efectos secundarios de estos productos hormonales son importantes en general(12): una hormona de síntesis -- por lo tanto, difícil de metabolizar por el organismo -perturba el equilibrio hormonal(13). Se ha establecido entonces que un cierto número de cánceres (cuello de útero, mamas) se ven favorecidos o causados por las llamadas píldoras anticonceptivas y que las mismas provocan graves trastornos cardio-vasculares. Un estudio recientemente realizado sobre 46 000 mujeres durante el período 1968 - 1993(14)demuestra una mayor mortalidad por enfermedades cardio-vasculares o por cáncer en las consumidoras de píldoras. Tanto la prensa como los fabricantes de estos productos y los ideólogos de la eugenesia suelen minimizar dichos efectos secundarios. Se habla de porcentajes de riesgo y no de cifras absolutas de decesos anuales. No obstante, entre los eugenistas, existen grupos ecologistas (WWF) que denuncian el uso industrial de perturbadores estrogénicos (productos que perturban el metabolismo de los estrógenos, imitándolos, bloqueándolos o anulando la acción o la producción de hormonas naturales), tales como el nonil-fenol, el octi-fenol, los PBC (bifenilo policlorado), el DDT, sustancias presentes en plásticos, pinturas, pesticidas, etc. Se ha observado en efecto, una feminización (bajo desarrollo de los órganos sexuales masculinos y generación de hormonas femeninas) en algunos animales (peces, lagartos, tortugas) como resultado de la contaminación, incluso muy anterior, producida por alguno de estas sustancias. Estos productos estrogénicos se concentran en general en las grasas donde permanecen. Este mismo grupo de ecologistas le atribuye incluso una disminución de la fecundidad masculina humana -que manifiestan haber observado - a estas mismas causas(15). Sin embargo, las concentraciones encontradas en los ámbitos naturales contaminados son infinitesimales [30 µg de nonil-fenol por litro de agua, mil veces son suficientes con el octi-fenol y los peces no se beben todo el agua ...] comparadas con las concentraciones impuestas a una mujer que toma la píldora.

Los ecologistas y los medios ponen el acento en la contaminación industrial, mientras que los casos de cáncer de útero aumentaron en un 50% durante el período en el que se introdujo la «contracepción» hormonal en los países occidentales. En cuanto a los países del Este y a Japón donde no se había introducido la «contracepción» hormonal, la incidencia del cáncer es más baja, a pesar de sufrir una contaminación industrial más marcada.

Existen entonces dos pesos y dos medidas, de acuerdo con el objetivo político buscado: la píldora forma parte de los fundamentos de la «sociedad liberal avanzada» inaugurada por el traidor social Giscard d'Estaing, por lo tanto es tabú aunque mate o enferme a los seres humanos; en nuestra sociedad, los animales son más importantes que los humanos y merecen entonces que la industria química esté mejor reglamentada.

c) la mentalidad infantofóbica

La contracepción química debido a su relativa facilidad de uso, permitió la banalización de una mentalidad hedonista de corto plazo que considera al niño ante todo como una molestia. Esta mentalidad contraceptiva favorece el aborto y es lo que puede observarse en los hechos. Se vende a los jóvenes la idea de una sexualidad como objeto de consumo, con el anzuelo químico correspondiente, lo que les permite tener una «vida sexual sin restricciones», que en otras palabras se llama promiscuidad irresponsable, y que da como resultado un importante aumento del número de abortos quirúrgicos, considerados como la rueda de auxilio de una contracepción ineficiente. Incluso el INED, organismo del Estado, reconoce que la contracepción no sólo no evita el aborto sino que lo multiplica(16).

Nuestra responsabilidad

Una mujer que utiliza la «contracepción» hormonal, aunque el producto fuera abortivo sólo en una pequeña proporción, nunca sabe si está o no abortando, como en una ruleta rusa (en la sien del niño). Es un hecho que muchos abortos químicos se producen de este modo. Nos encontramos frente a una problemática similar a la de la sangre contaminada: se pone en riesgo la vida del prójimo para obtener un beneficio personal; la negativa a saber o la ausencia de cuestionamiento no excluye la responsabilidad; el no querer saber instala la culpabilidad y es el caso al menos de los promotores y los fabricantes(17).

Al no haber estadísticas sobre el número de abortos provocados de este modo, se puede calcular un rango entre 400.000 a 2 millones por año en Francia.

Es urgente que se entienda y se difunda este mensaje y que para comenzar, aquellos que se oponen al aborto, dejen de utilizar estos medios abortivos disfrazados.

1. Sobre un total de 4 320 000 (Le Figaro, 8/1/1999).

2. El brusco cambio de las iglesias protestantes se inició en 1930 cuando la Conferencia de Lambeth de los obispos anglicanos aceptó la utilización de medios artificiales de contracepción para situaciones excepcionales. Fue obra de una minoría activa, entre ellos, el Muy Reverendo William R.Inge, miembro influyente de la Eugenics Society (Sociedad de Eugenesia) inglesa, portavoz de la iglesia anglicana en Londres, admirador desde 1920 de Margaret Sanger de quien había leído «Woman and The New Race»(«La mujer y la Nueva Raza»). La mayoría de las denominaciones «liberales» surgieron rápidamente, con la ayuda de los dólares y de los lobistas de Margaret Sanger. Es así como en los años 50, las iglesias metodistas distribuyen dispositivos intrauterinos y desde 1974 la Iglesia Reformista de Francia apoya la ley del aborto. En los años 50, la Iglesia Reformista de Francia ya había empezado tímidamente a aceptar la «contracepción» en «casos extremos».

3. Desde esta óptica, el rechazo de la procreación llevaría consigo la propia condena y autolimitación: aquél que no tiene descendencia, no transmite sus costumbres a sus hijos.

4. El Norplant fue probado en los países del Tercer Mundo desde 1972 (Haití, Brasil, Indonesia, Bangladesh, Jamaica, Chile, República Dominicana). La BBC produjo y difundió en 1995 un documental que expone la manera no profesional e ilegal con la que se llevaron a cabo las experimentaciones clínicas en Bangladesh. Existen asimismo, testimonios de mujeres que han sufrido efectos secundarios graves y que declaran no haber sido advertidas sobre la naturaleza experimental del Norplant ni sobre los posibles riesgos; se les negó además, la posibilidad de retirarles el implante. El Population Council (Consejo de la Población) es propietario de la licencia del producto que ha sido desarrollado por Sheldon Segal de la Fundación Rockefeller. En Estados Unidos, el Norplant fue aprobado recién a fines de 1990. El fabricante es Wyeth-Ayerst. Se estima en 2,5 millones, la cantidad de mujeres a quienes se les practicó el implante de Norplant. Existen a la fecha, cerca de 50.000 causas judiciales en Estados Unidos contra dicho fabricante, debido a los efectos secundarios del producto. Los promotores de Norplant recomiendan su utilización a las mujeres de «países en vías de desarrollo» o que padezcan «puerilidad» o «desequilibrio mental»

5. Nuestro inenarrable médico «pies desnudos» ministro de Salud Kouchner aspira incluso a que esta droga pueda expenderse sin receta médica (diario Le Monde 22 -23 de noviembre 1998). Esto se parece a la forma en que el régimen chino pone en riesgo la vida de las mujeres chinas haciéndolas abortar con la RU486 siendo que la infraestructura necesaria para la utilización de este producto es inexistente en ese país.

6. Se lanzó una campaña-test en 5 ciudades norteamericanas, con spots de TV, radio, diarios, etc, todo bajo el ejido de la Oficina de Investigación de la Población de la universidad de Princeton, cuyo director, James Trussel trabaja para el grupo militante Reproductive Health Technology Project (Proyecto de Tecnología para la Salud Reproductiva) (cf. http://ec.princeton.edu). Esta campaña concluyó en 1998 con la aprobación por parte del FDA de Estados Unidos y con el lanzamiento al mercado oficial, de Preven conocido en Francia con el nombre de Tétragynon, píldora abortiva llamada «del día después», fabricada por el Alemán Schering A.G.. Unos meses más tarde, el Tétragynon obtenía la autorización de venta en Francia.

7. Ver Le Quotidien du Médecin del 30/10/1998, "La contracepción en 1998: no creamos que todo es perfecto», cuando Baulieu promociona nuevamente el aborto químico con el nombre de «contracepción de emergencia» o «contracepción tardía». Lo acompaña en esta empresa Elizabeth Aubény, ejecutiva en Broussais, que acaba de crear una asociación para la promoción de la «contracepción de emergencia» (ADCU) Es notable también la poca importancia que algunas asociaciones supuestamente en contra del aborto le prestan a este sistema abortivo como por ejemplo Grossesse Secours, quien estando subvencionado por la ciudad de Paris recomienda desde hace años el uso del método de Yuzpé en su servidor Minitel (3615 SOSG)!

8. El comunicado de prensa OMS del 7/08/1998 cita la publicación en el Lancet del 8/08/98 de los resultados de un estudio financiado por el PNUD, la FNUAP, la OMS y el Banco Mundial; este estudio realizado sobre 1998 mujeres parece probar que las «píldoas del día después» a base únicamente de progestativos son más eficaces que las píldoras a base de estrógenoprogestativos (método conocido como de Yuzpé). En dicho comunicado de prensa, la OMS se contradice: afirma que 80.000 mujeres mueren al año a consecuencia de abortos practicados «fuera de un ámbito médico», siendo que desde hace años, la cifra pregonada por la misma OMS era de 200.000.

9. El porcentaje de embarazos que se produjeron a pesar de la utilización de píldoras combinadas fue del 3% anual: los espermatozoides lograron su cometido, la ovulación y luego la fecundación tienen lugar y a pesar de la degradación del endometrio, en este caso, se produjo la nidación del niño.

10. Sin abundar en detalles técnicos para cada tipo de producto, presentamos a continuación una lista de tratamientos que interfieren con los efectos contraceptivos de los mismos los barbitúricos, medicamentos contra la tuberculosis, los anticomiciales, algunos funguicidas y antibióticos, tranquilizantes, sedantes, analgésicos, antihistamínicos, neurolépticos, antimigraña, citostáticos, hipolemiantes, miorelajantes, laxantes. Por otro lado, algunas enfermedades disminuyen igualmente los efectos: diarrea, vómitos. Los efectos secundarios y las interacciones medicamentosas están ampliamente documentados en Internet (http://mattweb.hcuge.ch/matweb/ etc...).

11. Chang MC, Hunt DM. Effects of various progestins and estrogen on the gamete transport and fertilization in the rabbit. Fertlity and sterility. 1970 ; 21 : 683-686

12. Una publicación reciente (A consumer guide to the pill and other drugs, John Wilks, B.Pharm. M.P.S., sept.97, ed. ALLInc., USA) describe la investigación en este campo la que prueba ampliamente la toxicidad de los diferentes métodos de»contracepción» hormonal. Los medios y el ámbito eugenista intentan siempre esconder y minimizar las consecuencias, mientras que la investigación científica es terminante al respecto. Wilks señala la complicidad de las administraciones de Salud Pública en la desinformación de las mujeres acerca de los riesgos a los que su salud está expuesta.

13. en cambio no sucede lo mismo con las hormonas naturales, generalmente comestibles (en las leguminosas, etc) ce qui n'est pas le cas des hormones naturelles généralement comestibles (dans les légumineuses, etc...) que se digieren y se «fraccionan»

14. Le Figaro -8/01/1999 : «las tasas de mortalidad por ataque cerebral, accidente o suicidio se incrementan notablemente con esta contracepción. (...) se observa un incremento del cáncer de hígado (126 casos de consumidoras de píldoras contra 34 casos en el resto) del cáncer de pulmón (107 casos en el primer grupo, 71 en el otro) y de cáncer de cuello de útero (115, en el primer grupo y 57 en el otro) (...) el riesgo de cáncer de pulmón se duplica y el de cáncer de cuello de útero se cuadruplica en las mujeres que han utilizado la píldora durante más de 10 años» El diario Le Figaro hace hincapié en que estos resultados no son significativos, ¿los de la OMS, sí lo son, obtenidos de una muestra de 1998 mujeres en lugar de 46.000? Los títulos de la prensa son sgnificativos de su parcialidad: Le Figaro titula «los riesgos mínimos de la píldora», el Nouvel Observateur «La píldora: sin riesgo a largo plazo» (14/01/99), La Croix «,Los efectos nefastos desaparecen diez años después de interrumpir el consumo de la píldora»

15. Si los eugenistas lo hubiesen deseado, la industria lo habría hecho: en Dacca, durante la Conferencia Internacional de la Planificación Familiar, Paul Ehrlich (de Zero Population Growth/Crecimiento Poblacional Cero) recomendó al gobierno federal norteamericano asignar fondos al desarrollo de productos esterilizantes de masa para ser introducidos en los sistemas de distribución de agua corriente. Los accidentes originados por " perturbadores estrogénicos» no parecen ser intencionales sin embargo, se desconoce el origen de los estrógenos en las riveras inglesas. ¿podría tratarse de restos de píldoras «contraceptivas» arrojadas a los desagües? Hasta el momento no se ha identificado en esos cursos de agua, la molécula principal (etinil-estradiol).

16. Léridon del INED, citado por l'Express el 8/10/1998: «Cada vez son menos aceptados los hijos no programados»

17. fabricantes entre los cuales Roussel-Uclaf, cuyo nombre es actualmente Hoechst-Marion-Roussel (o Aventis),ocupa un lugar importante como principal proveedor de etinil-estradiol, componente estrogénico de la mayor parte de las píldoras estro-progestativas.. Había una lógica en la promoción de la RU486.